Todos merecemos el mismo respeto, no a la discriminación

El acceso al transporte público como tal, es un derecho que todas las personas tenemos, poder desplazarnos libremente, para ello, todas las empresas y organismos implicados en el transporte público deben tener esto como un principio, y cuidar la accesibilidad y sobre todo que una persona con discapacidad tenga plena movilidad para viajar a donde quiera o desee.

Este es el caso del señor Angel Castro, una persona de la tercera edad con una discapacidad física, viaja todos los domingos de Suscal a Cañar.

Él denuncia que un bus de una de las empresas del cantón Cañar que cubre la ruta Chontamarca-Cuenca no quizo traerle y menciona que es algo injusto ya que no debería ser excluido por su condición.

Castro tiene los datos de la unidad que vulneró su derecho y manifiesta que pondrá la denuncia formal.

Sin embargo, este texto es para llegar con un mensaje de conciencia a todos los organismos del transporte público, y el énfasis en la inclusión de personas con discapacidades, garantizar que todo el mundo tenga las mismas oportunidades de participar en todos los aspectos.