Azogues

En Azogues se destapan casos de abuso sexual a menores

Madres de familia acudieron a dialogar con la directora del Distrito de Educación y luego visitaron al gobernador para pedir su ayuda.

A raíz de que han salido a la luz a nivel nacional varios casos por abuso sexual, especialmente de niños, niñas y adolescentes en los establecimientos educativos del país, en Azogues y sus alrededores, en lo que va de este mes, se han puesto tres denuncias por presunto abuso sexual a menores por parte de sus docentes.

El primer caso se conoció la semana pasada, de parte de Cristina G., madre de una adolescente presuntamente violada por un profesor de una escuela del centro de la capital cañari.
A la denuncia de violación receptada por la Fiscalía se ha modificado la figura penal: la Fiscalía acusa al agresor por “estupro”, o acceso sexual aceptado voluntariamente, por menor de edad mayor de 14 años. Este delito se considera menos grave que la violación y se sanciona con pena de 1 a 3 años de prisión.

Indicó la madre que según el testimonio de la menor, por tres ocasiones fue ultrajada bajo amenaza y chantaje de que sino accedería a sus peticiones, le pondría bajas calificaciones o perdería el año, dado que ella, por ser de constitución gruesa, tenía dificultad para realizar ciertos ejercicios físicos.

Esto habría ocurrido, por primera vez, en abril. Le habría dicho a la menor que ha sacado una mala calificación de ajedrez, cuando la llevó a a una bodega de cultura física en el propio establecimiento educativo en donde habría procedido a acometer el acto, advirtiéndole que no lo cuente a nadie, acto que se repitió en los meses siguientes.

La madre de la joven explicó que, “hace aproximado un mes, mi niña no soportó más su silencio y contó lo ocurrido, por lo que la denuncia fue presentada a la Fiscalía. Del examen médico se confirmó que en efecto existen evidencias del hecho; el sicólogo informó que la versión de la menor es creíble y que “existieron relaciones sexuales entre las dos personas”.

Sin embargo de las evidencias, el fiscal del caso estima que se trata de “estupro”, indicando que en el informe la menor ha dicho que sentía atracción por el profesor, lo cual es falso en primer lugar, pues para consumar el acto utilizó la amenaza de que iba a perder el año, precisa la madre.

Sobre este caso, Leonardo Amoroso, Fiscal Provincial del Cañar, manifestó “que la indagación de la presunta violación está a cargo del Fiscal Javier Romo, quien ha pedido el archivo de este caso porque no existe el tipo penal que se estaba investigando, existiendo un obstáculo legal”.

Además, Informó que, según el examen sicológico, la joven sentía una atracción hacia el profesor, y que a la hora el acto sexual ella ya tenía 14 años dos meses de edad, lo que modifica la figura delictual, de violación a estupro.

El artículo 167 del Código Integral Penal, indica que será acusado de “estupro” la persona mayor de dieciocho años que recurriendo al engaño tenga relaciones sexuales con otra, mayor de 14 y menor de 18 años y sancionada con pena privativa de libertad de uno a tres años.

Ayer, dos nuevos casos se destaparon: dos madres de familia, una de la comunidad de Hornapala, cantón Déleg, y otra de Guayaquil, radicada en este lugar, piden justicia, ante denuncias presentadas en fiscalía, que no avanza.

Narran que el 30 de enero, sus niñas, junto a otras cuatro compañeras, habrían sufrido abusos sexuales por un docente, de Deleg.

La madre, preocupada, dice que su niña no se puede recuperar del trauma que generó este acto, la mujer muestra una copia de las versiones de las niñas que cuentan a una sicóloga.

“No entiendo como es que pasó, yo me llevaba bien con el profesor porque era presidente del comité de padres de familia, mi hija cambió, se volvió agresiva, sacaba malas notas, no sabía qué pasaba, yo averigüe y mi otro hijo me contó”, apunta.

Narra que para evitar escándalos no denunció enseguida y acudió a hablar con María Fernanda Cabrera, directora del distrito de educación. “Me prometió que va a luchar hasta con su vida para ayudarme, cuando le conté” dice la angustiada mujer.

“Por confiar en la autoridad de la directora no puse la denuncia, luego puse la denuncia en la fiscalía de Deleg, pero no avanzó el caso, me dijeron que se había archivado, luego fui, me armé de valor y fui a Cuenca, luego puse la denuncia aquí en la fiscalía y está llevando el caso la fiscal Beatriz Ormaza. Espero que ella, como una madre y profesional honorable, me ayude, son seis casos, yo lo hago por mi hija”, dice.

La mujer asegura que tras el problema el maestro le ofreció dinero para que se calle y presume que lo mismo hizo con las demás madres que no han denunciado. “Ahora pido que ayuden a mi compañera, que su caso no avanza”, señala.

Vanesa T. es otra madre que pide justicia, para su hija de 11 años, ella se enteró del abuso que sufrió su niña y seis compañeras mediante un padre de familia que la alertó,
“Me manifestó que la sicóloga del Distrito había llegado a entrevistar a las seis niñas afectadas, ese día hubo reunión en la escuela y la gente estuvo alborotada por lo que se decía del profesor, como él tiene 25 años en la institución nadie cree que pudo hacer esto”.

“Al ser de Guayaquil, fui agredida por la gente que me ha visto mal, porque me dicen que sin ser del lugar yo llego a poner la denuncia, yo fui a denunciar en la fiscalía de Deleg, y el secretario se portó majadero me dijo por qué denuncia si todos los padres de familia están a favor del profesor. No me tomó la denuncia, después regresé y la fiscal ordenó que me tome la denuncia, el secretario dijo a esta majadera no la tomo, y después ella mismo tomó la denuncia”.

A raíz de la denuncia, la gente del lugar se ha puesto en contra de las mujeres ya que aducen que si el profesor que es de Cuenca y es detenido, la escuela se cerraría y no tendrán en dónde estudiar sus niños.

Vanesa T. manifiesta que en el sector sus hijos sufren acoso y los han amenazado, por ello, en vista de que no avanza su caso y se siente insegura, ha regresado a vivir en Guayaquil.

En ese tiempo, las mujeres acudieron hasta la Defensoría del Pueblo a pedir apoyo para que se intervenga en estos casos, de lo cual el defensor, John Ojeda, manifestó que de los casos de Deleg, se notificó a la fiscalía para que les notifiquen cómo avanza el caso dentro de nuestra competencia.

No se ha emitido una providencia, se quedó en que nos iban a informar, pero no se ha hecho conocer hasta el momento, no se esta dando cumplimento ni paso para ejercer la vigilancia; al haber la excusa de la fiscal de Déleg, el caso se está llevando aquí, en Azogues, pero no hemos tenido la respuesta de la fiscalía. Estamos preocupados y esperamos que la señora fiscal pueda notificar qué ocurre, en caso de no haber un pronunciamiento, la fiscalía estará vulnerando un proceso, pues se trata un delito en contra de menores. (I)

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