Jessica Ximena Castro Guamán, de 23 años de edad, oriunda del cantón Suscal, provincia del Cañar, perdió la vida después de permanecer varios días con respiración artificial en el hospital de Massachusetts, a consecuencia de un impacto en la cabeza que sufrió al caer del techo de una casa en donde cumplía su jornada laboral como albañil.
La joven mujer deja dos niños de tres y 8 meses en la orfandad, en estos momentos a cargo de las autoridades del Estado de Boston, en espera de que algún familiar cercano reclame su custodia.
Su prima Magdalena Guamán que vive en esa ciudad hace 17 años, narró que la mañana del 30 de mayo del 20017, como todos los días Jéssica salió a trabajar a las 6 de la mañana; su hora de regreso era a las 6 de la tarde; “yo trabajo en un negocio propio y siempre ella pasaba a visitarme, pero ese día no llegó, nos preocupamos y buscamos información, ahí nos enteramos que mi prima se había caído del techo de la casa donde trabajaba y fue trasladada a una casa de salud con ayuda de su jefe que llamó a la ambulancia” expresó.
Guamán manifiesta que una compañera de trabajo les informó que ese día, a las 9 de la mañana se encontraban laborando, se sentían agotadas y deseaban descansar para continuar sus labores; Jéssica no quería el descanso, sino que continúo trabajando, minutos después hizo un alto para cubrirse ya que el clima estaba muy frio, en un momento de descuido su compañera escuchó un fuerte ruido, cuando se percató que el techo se había roto, cayendo Jéssica al vacío , impactándose fuertemente en la cabeza.
Al lugar habían llegado paramédicos y policías, la mujer fue trasladada a un hospital en donde los médicos diagnosticaron muerte cerebral.
Desde el 30 de mayo hasta del 1 de junio Jéssica Castro pasó con respiración artificial, su cuerpo empezó a descomponerse, no se pudo hacer nada para salvarla, los médicos desconectaron las maquinas.
Jéssica Ximena Castro Guamán salió hace 5 años de su hogar ubicado en el recinto Nar del cantón Cañar, a donde se habían trasladado desde Suscal con sus padres, Antonio Castro y Balbina Guamán desde hace algunos años; la joven llegó al país del Norte cruzando la frontera con México, ahí le recibió su prima Magdalena Guamán, ella vivía con un hermano menor que había salido hace pocos años del Ecuador, Jéssica era madre soltera y como todo compatriota que llega al país de los sueños, ella también quería trabajar y superarse, por eso todos los días luchaba para conseguir el pan para sus dos niños.
Los restos de Jéssica permanecían velándose en una funeraria en Massachusetts a la espera de que alguna autoridad ayude con los trámites para la repatriación de su cuerpo, al no tener respuesta, se organizaron entre parientes y vecinos mediante recolecta, más el apoyo de la persona que había empleado a la joven, lograron repatriar su cuerpo; y en su hogar ubicado en la Playa de Nar su madre prepara el espacio para los actos fúnebres.
Balbina Guamán madre de Jéssica Castro, manifestó que al enterarse del accidente de su hija, acudió con su esposo al consulado para solicitar una Visa Humanitaria la cual fue negada, ante la negativa la pareja entró en la desesperación sin tener a quien pedir ayuda ya que su presencia es necesaria para que el gobierno de EE.UU entregue la Patria Potestad de los niños, que en este caso solo es permitido entregar a los abuelos, y de no acudir oportunamente, el Estado de ese país en sus leyes, otorgará en adopción a los pequeños. “En medio del llanto Balbina Guamán, pide al presidente Lenin Moreno, a la Cancillería, el Ministerio de Movilidad Humana, le ayuden para poder llegar donde sus nietos, “por el amor a Dios ayuden, señores del Consulado, no tenemos recursos, no sabemos que hacer para traer a nuestros nietitos de regreso, no queremos que allá les pase nada, ni que el gobierno les de en adopción, ruego por favor señor presidente ayúdenos con la Visa Humanitaria” fueron las tristes expresiones de la mujer, entre el llanto y el dolor.
Cuando se dio el accidente se habría ofrecido ayuda por parte de alguna institución ecuatoriana para tramitar una Visa Humanitaria para los padres de Jéssica; sin embargo Magdalena Guamán, prima de la fallecida, aduce que ya se ha hecho de todo, se han agotado esfuerzos ayudando con los tramites para gestionar la Visa y que aún no haya ninguna respuesta, lo que genera preocupación, “por eso pedimos muy comedidamente que este mensaje llegue a la sensibilidad de las autoridades para que ayuden a los padres de Jéssica que son de escasos recursos y no pueden hacer nada, por favor ayuden para que los niños de mi prima no se vayan en adopción” concluyó Magdalena Guamán. (I)
