

La construcción del paso elevado sobre la avenida 24 de Mayo, una obra que la actual administración municipal de Azogues promociona como una obra que da a la urbe una característica de grandes ciudades del mundo, ha dado lugar a opiniones divididas que surgen de voces ciudadanas y de criterios técnicos que observan su funcionalidad y diseño.
Sobre esta obra, ya lista en su estructura de hormigón y entrará a funcionar en 30 días una vez concluya la construcción de obras complementarias como la iluminación y el redondel junto a la Terminal Interparroquial, dan su criterio técnico el docente de la Unidad Académica de Ingeniería Civil, Arquitectura y Urbanismo, de la Universidad Católica sede Azogues, Lauro Verdugo y del exalcalde de Azogues, Eugenio Morocho Quinteros, de profesión arquitecto.
Para Lauro Verdugo, quien a pedido de la decana de dicha unidad académica, Liliana Arias, realizó un estudio técnico del proyecto, el paso elevado debió ser diseñado por todo un equipo de profesionales técnicos, con el fin de garantizar no sólo su infraestructura, sino su funcionalidad y seguridad para los conductores y peatones, así como las condiciones ambientales y el paisaje urbano.
Verdugo señala desventajas con la presencia del paso elevado, a las cuales agrupa, según su naturaleza, en ambientales, de seguridad, paisaje urbano y funcionalidad.
Condiciones
Entre las condiciones de seguridad anota el riesgo de atropellamientos por la inadecuada ubicación de los pasos peatonales bajo el paso elevado; el riego de asaltos a peatones por la generación de espacios con limitada visibilidad e iluminación; y el riesgo de accidentes para peatones que cruzan por la zona del nuevo redondel, debido a la falta de visibilidad.
Verdugo sostiene que por la forma como ha sido concebido el mismo en su diseño, el proyecto causa fuerte agresión al paisaje urbano de la ciudad, así como limitaciones visuales desde y hacia las edificaciones circundantes.
También se anota que al disminuir la sección de la avenida 24 de Mayo, que comunica al norte con el sur de la ciudad, se limita la funcionalidad de la misma, reduciendo su capacidad y por tanto, limitando el flujo adecuado que debería existir en la misma, para permitir la interconexión entre los diferentes sectores de la ciudad.
Para Lauro Verdugo, la ejecución del proyecto en cuestión no solucionará el problema del congestionamiento vehicular en la ciudad, puesto que la solución sostenible en el tiempo está relacionada con la búsqueda de estrategias y acciones que disminuyan la cantidad de vehículos particulares en el centro de la ciudad, a través de disminuir la necesidad de desplazamientos de los ciudadanos con la desconcentración de varios de equipamientos, sobretodo de los educativos.
Inauguración será en 30 días
Se anunció que el 1 de septiembre, con el inicio de clases, se abriría el paso al tránsito vehicular pero la importación de las lámparas Led, ha retrasado el inicio de labores de iluminación.
También está en construcción un redondel, al norte, mismo que estará concluido en aproximadamente 30 días, informó Óscar Calle, director de Obras Públicas del Municipio de Azogues.
Calle indicó que se firmo el acta de recepción provisional del paso elevado y que, por administración directa, se construyó las escalinatas de acceso a la calle Serrano, con la misma modalidad se ejecuta el redondel y el ajardinamiento de algunas áreas, donde se preparó el suelo para siembra de plantas.
El costo final de la infraestructura del paso elevado es de 485.000 dólares, el valor inicial fue de 360.000 dólares, el encarecimiento se debe al rediseño de la obra por un problema de suelo, precisó Calle. La fiscalización se contrató por el monto de 16.000 dólares.
El redondel que se construye por administración directa tiene un presupuesto de 20.000 dólares y su iluminación e instalaciones hidráulicas, hidrosanitarias y eléctricas, 36.000 dólares. La iluminación del paso elevado costará 34.000 dólares.
El paso elevado sobre la avenida 24 de Mayo tiene dos ramales: para la circulación hacia el sur y hacia el norte, con una longitud de 57 y 40 metros, respectivamente, y un total de 140 metros de longitud de calzada desde la calle Serrano.
El ancho de cada ramal es de 4 metros, con pasamanos de hormigón armado de 1,10 metros, señalización horizontal y vertical. La altura de las columnas, antes de iniciar la pendiente es de 6 metros. “La pendiente sur es de 12 % y la norte de 18 %”.
Calle dice que el paso elevado fue diseñado y construido conforme al Código Ecuatoriano de la Construcción y garantiza las condiciones para la circulación de vehículos. Los conductores sólo deben tomar las precauciones de velocidad máxima permitida en las ciudades (30 km/h). El cálculo de la infraestructura es para todo tipo de vehículos, excepto los de carga pesada.
El paso elevado está situado en un área de intenso tráfico como el Terminal Interparroquial, para evitar el peligro y el congestionamiento el municipio tiene un anteproyecto para convertir a este equipamiento en un terminal de transferencia.
“Obra no responde a la técnica…”
El exalcalde de Azogues, Eugenio Morocho Quinteros, recordó que en el 2009, cuando estuvo en el ejercicio de la alcaldía, había solicitado un informe técnico respecto a este proyecto, mismo que venía desde administraciones anteriores.
El principal cuestionamiento fue a la pendiente del 23% que se proponía, cuando las normas para estudios y diseños viales del Ministerio de Transporte y Obras Públicas aconsejan que ésta no debe ser superior al 12%.
En Azogues, las pendientes máximas son del 12%, precisa el exalcalde, al hablar de las razones por las que mandó a archivar dicho proyecto.
“Porque estando un técnico en la Municipalidad de Azogues habría sido un error garrafal dar paso a un proyecto que desde el punto de vista urbanístico y técnico no iba a dar resultado”, señala.
Según Morocho, la obra tiene anchos que no concuerdan con la técnica porque es de un solo carril; “los pasos a desnivel deben ser por lo menos de tres carriles, con las pendientes correctas y con los radios de curvatura que se apeguen a las exigencias técnicas”, dice.
Para el exalcalde, la funcionalidad de la obra se verá con el tiempo, pero más allá de ello, se ha agredido a la ciudad, dice, al calificar a la obra de estéticamente grotesca en un lugar importante de la ciudad, en el acceso norte, que tenía algunas características especiales que le otorgaba cierta identidad a la urbe, que ahora ha sido agredida con una obra que no responde a la técnica, la funcionalidad y a la estética, subraya.
Considera que este proyecto no está debidamente sustentado, pues no consta priorizada en el Plan de Desarrollo y Ordenamiento Territorial. “Aquí es donde la Contraloría debería actuar ya de oficio”, añadió.(I)