
La movilización también rechaza a las cocinas eléctricas y la anunciada eliminación del subsidio del gas.
“Nunca nos rendiremos en la defensa del agua y no queremos las cocinas eléctricas, nada de esto nos imponían en las presidencias de Velasco Ibarra ni de Galo Plaza”, expresó Anita Pérez, una mujer de avanzada edad, de la zona de Victoria del Portete, mientras recibía los símbolos de reconocimiento como defensora del agua, por parte de la líder indígena Juana Morocho, del cantón Nabón.
Varias intervenciones prosiguieron mientras las mamas indígenas quichuas y saraguras hacían su ritual con el fuego, flores de guando y otros elementos, en la Y de Tarqui, llamada también la “Y de la resistencia”, según Carlos Pérez, presidente de la Ecuarunari. Estaban delegaciones de Zamora Chinchipe, de Nabón, de Girón, de Santa Isabel, Victoria del Portete, Tarqui y otras poblaciones. El momento había llegado y la llamada “Marcha por el Agua y la Vida” debía avanzar hacia Cuenca.
Eran las 10:30, las mujeres de Victoria del Portete aceleraban sus manos repartiendo la colada de avena y galletas que habían preparado para los manifestantes, entre los que estaba Rosa Lanchimba, quien durante todo el trayecto con su guitarra azul y su canto, animaba la marcha en el largo trayecto. “Son del pueblo Cayambe, me sumo porque me interesa defender nuestros derechos al agua libre de contaminación, el acceso a la educación de nuestros hijos. Tampoco quiero que nos impongan las cocinas eléctricas y que suban las tarifas de electricidad y el precio del gas”, aseguró.
En la Y de Tarqui se unieron el alcalde de Santa Isabel, Rodrigo Quezada y el prefecto Salvador Quishpe, de Zamora Chinchipe, quienes intervinieron para expresar el respaldo a la marcha. Hubo delegaciones del Frente Popular y sus organizaciones filiales, pero en pequeñas cantidades, la mayoría eran campesinos e indígenas.
Por qué nos oponemos a la aprobada ley de aguas, porque nosotros presentamos apenas 5 gotitas para que en esos 180 artículos incluyan: que se cree un consejo plurinacional del agua conformado por el gobierno y las comunidades, sin embargo nos incluyen con voz, pero sin voto; que se extingan las concesiones mineras que están en territorios donde hay fuentes de agua, para que no las contaminen; que los sistemas comunitarios de agua tengan su autonomía, dijo Carlos Pérez. Además, que se redistribuya equitativamente el recurso agua ya que el 64 % del total del caudal está concentrado en el 1% de los propietarios privados; y finalmente, que se reforesten las áreas deforestadas y se protejan los páramos mediante la creación de un Fondo Nacional del Agua.
“Eso no nos aceptó la Asamblea Nacional, por eso esta marcha. No importa con sol o con lluvias, no importa que nos insulten, que nos digan siquiñaguis, cuatro pelagatos, infantiles, locos ecológicos, terroristas, indidos roscas, aquí estamos y llegaremos a Quito”, agregó el dirigente nacional. La Policía ubicó desde temprano cuatro grupos de uniformados, uno en la Y de Tarqui, en Zhucay, Narancay y Control Sur. En general la marcha se cumplió normalidad, de manera pacífica.(AZD)
Detalles
La vaca avanza con la marcha, se ha constituido en una especie de alcancía en la cual el público deposita su contribución económica para el mantenimiento de la gente que avanza desde el cantón El Pangui con dirección a Quito. La aciana dirigente indígena de Nabón, Juana Morocho, afirmó que vino a recibir a los manifestantes y acompañarlos hasta Cuenca, pero que su decisión es luego alcanzarlos en Quito, en la lucha por el uso apropiado del agua.
El retraso en la hora de llegada prevista para las 12:30, impidió que se lleve a cabo la misa en la Catedral de la Inmaculada, sin embargo una religiosa presidió el rezo en el que participaron los participantes de la marcha.
En el trayecto desde Tarqui, a la altura de Zhucay hubo un altercado: los uniformados obligaron a la gente a bajar de los carros. El jefe del grupo policial, Pablo Ramírez, explicó que era por seguridad, para evitar que se caigan.
Entrevista a:
Salvador Quishpe, prefecto de Zamora Chinchipe
La marcha sigue, avanzamos a Quito, no nos vamos a detener, este es un proceso de resistencia en defensa de los derechos del pueblo, expresó el prefecto de Zamora Chinchipe, Salvador Quishpe, a su arribo a la Catedral de la Inmaculada de Cuenca, cuando ya se conoció de la aprobación de la Ley de Aguas, por parte de la Asamblea Nacional.
La marcha es en defensa del agua. ¿Cuál es la propuesta?
Son varios temas los que hoy nos convocan, por un lado el tema del agua, pedimos que se cree un consejo plurinacional que incluya a los sistemas comunitarios, a las juntas de regantes, a los productores.
¿El agua debe ser manejada por las comunidades y no por el Estado?
El Estado es plurinacional, dice así la Constitución, pero el gobierno dice que el Estado es el único que tiene la autoridad para administrar el agua, entonces le hemos preguntado y quién es el Estado, de cuando acá se reduce sólo al gobierno, o al Presidente de la República, o al partido político de Alianza País; le recordamos que nosotros también somos parte del Estado y queremos ser parte del consejo que dicte las políticas para el uso del agua.
¿Qué otros temas se incluyeron en la plataforma de la marcha?
Son 10 puntos, en eeducación, hay más de 300.000 jóvenes que no han podido entrar a las universidades; hay una Constitución que dice que la educación hasta el tercer nivel será gratuita para todos. Se viene el paquetazo camuflado en el cambio de matriz energética, nos quieren obligar a comprar cocinas y ollas eléctricas, a reemplazar los cables de 110 a 220 voltios; en estos días nos han subido las tarifas de energía eléctrica y nos quieren eliminar el subsidio del gas.
¿No crée que incluir tantos temas desvirtuó el objetivo de la marcha?
No, nosotros no somos excluyentes, recogemos el sentir del pueblo, los 10 puntos son sólo algunos de los tantos que se plantearon.
Ya se aprobó la Ley de Aguas. ¿Qué hacer ahora?
Seguiremos luchando porque se implemente el Estado Plurinacional. Esta ley no va a tener mayor efecto, el agua que está acaparada por unos pocos seguirá así y nosotros buscamos la redistribución. Nosotros nunca hemos querido adueñarnos del agua, ese es el discurso del Primer Mandatario, no queremos un consejo indígena sino plurinacional. Esto vamos a seguir aclarando.