La ciudad de Azogues enfrenta más de 140 días de estiaje, lo que ha agravado la crisis del suministro de agua potable en varias zonas. Uno de los casos más críticos es el de la Junta de Agua Potable de la Parroquia Cojitambo, donde se han extendido los racionamientos de agua hasta por cuatro días, debido a la drástica reducción del caudal en las fuentes de captación. La situación preocupa tanto a los habitantes de la parroquia como a los miembros de la junta, quienes luchan por garantizar el acceso a este servicio básico.
Francisco Santacruz, presidente de la Junta de Agua de Cojitambo, explicó que la falta de agua en las fuentes es tan crítica que, en ocasiones, deben distribuir el líquido vital a las comunidades con intervalos de hasta tres o cuatro días. «Es algo realmente crítico. En las fuentes donde tenemos las captaciones hay muy poca agua. A veces nos toma un día y medio llenar un solo tanque, pero en cuanto comenzamos a distribuirla, los tanques se vacían en solo dos horas», relató Santacruz, quien también destacó que este problema se ve reflejado en las 24 comunidades y 2,700 usuarios que dependen del servicio.
La junta de agua, que atiende a las comunidades de Cojitambo, ha intentado organizar el reparto del agua en horarios establecidos, pero la escasez del recurso lo hace imposible. A pesar de contar con tanques de diversas capacidades (250, 150 y 75 litros), la reducción del caudal ha complicado el proceso de llenado, lo que ha llevado a la imposibilidad de garantizar un suministro constante en la parroquia.